La concentración de la propiedad de los medios (también conocida como consolidación de medios o convergencia de medios) es un proceso por el cual progresivamente menos personas u organizaciones controlan el aumento de la participación de los medios de comunicación.

La investigación contemporánea demuestra niveles crecientes de consolidación, con muchas industrias de medios ya altamente concentradas y dominadas por un número muy pequeño de empresas.

A nivel mundial, los grandes conglomerados de medios incluyen BertelsmannNational Amusements (ViacomCBS), Sony CorporationNews CorpComcastThe Walt Disney CompanyAT&T Inc.Fox CorporationHearst CommunicationsMGM Holdings Inc.Grupo Globo (América del Sur) y Lagardère Grupo.

La propiedad de los medios puede ir desde la completa desregulación hasta el control estatal de manera directa o indirecta.

Oligopolio mediático

Un oligopolio es cuando unas pocas empresas dominan un mercado.​ Cuando las compañías de medios de mayor escala compran las compañías más pequeñas o locales, se vuelven más poderosas dentro del mercado. A medida que continúan eliminando su competencia empresarial a través de compras o forzándolos (porque carecen de los recursos o las finanzas), las compañías restantes dominan la industria y crean un oligopolio de los medios.

Riesgos para la integridad de los medios

La integridad de los medios está en riesgo cuando un pequeño número de empresas e individuos controlan el mercado de los medios. La integridad de los medios se refiere a la capacidad de un medio de comunicación para servir al interés público y al proceso democrático, lo que lo hace resistente a la corrupción institucional dentro del sistema de medios, la economía de influencia, la dependencia conflictiva y el clientelismo político.

 La integridad de los medios está especialmente en peligro en el caso de que existan relaciones clientelares entre los propietarios de los medios y los centros políticos de poder. Tal situación permite una instrumentalización excesiva de los medios para intereses políticos particulares, lo cual es subversivo para el papel democrático de los medios.

Pluralismo mediático

La concentración de la propiedad de los medios se considera comúnmente como uno de los aspectos cruciales que reducen el pluralismo mediático. Una alta concentración del mercado de medios aumenta las posibilidades de reducir la pluralidad de puntos de vista políticos, culturales y sociales. El concepto de pluralismo de los medios es más amplio, ya que toca muchos aspectos, desde las reglas de control de fusiones hasta la libertad editorial, el estado de los organismos públicos de radiodifusión, las condiciones de trabajo de los periodistas, la relación entre los medios y la política, la representación de las comunidades locales y regionales y la inclusión de las voces de las minorías. Además, abarca todas las medidas que garantizan el acceso de los ciudadanos a fuentes diversificadas para permitir la formación de una pluralidad de opiniones en la esfera pública sin la influencia indebida de los poderes dominantes.

Además, el pluralismo de los medios tiene una doble dimensión, o más bien interna y externa. El pluralismo interno se refiere al pluralismo dentro de una organización de medios específica: en este sentido, muchos países solicitan servicios de transmisión pública para tener en cuenta una variedad de puntos de vista y opiniones, incluidos los de los grupos minoritarios. El pluralismo externo se aplica en su lugar al panorama general de los medios, por ejemplo, en términos del número de medios de comunicación que operan en un país determinado. 

La propiedad de los medios puede plantear serios desafíos al pluralismo cuando los propietarios interfieren con la independencia y la línea editorial de los periodistas. ​